Los principales hallazgos de este estudio sobre la rentabilidad de la banca en Chile dan cuenta de los ingentes beneficios que se lleva el sector.

CELAG está llevando a cabo una investigación de la banca en 10 países de América Latina basada en los registros públicos de los estados contables y de resultados que las instituciones brindan a aquellas que regulan el sistema financiero. En este informe presentamos los principales resultados sobre la rentabilidad bancaria en Chile.

Principales hallazgos

  • En 2019, la rentabilidad de los bancos chilenos promedió 1,2% (ROA, resultados antes de impuestos respecto al activo total) y 16,2% (ROE, resultados antes de impuestos respecto al patrimonio neto), lo que significó 3.540 mil millones de pesos chilenos o 4.835 millones de dólares de beneficios[1] al tipo de cambio oficial. Este monto equivale a:
    • 15,6% de la masa de rentabilidad de las 100 empresas cotizantes más grandes de Chile[2]
    • 55% de las utilidades de la gran minería[3]
    • 1,6% del PIB
    • Cinco veces lo que el Estado chileno invierte en desarrollo de viviendas o diez veces los gastos en protección del medioambiente[4].
  • Desde el punto de vista del inversionista, estos indicadores le permiten recuperar su inversión en tan solo 6 años, contrastando fuertemente contra los 16 años de la aerolínea LATAM, los 18 años de la constructora Plaza o los 33 años de la viña Concha y Toro[5].
  • Desde 2005, los bancos chilenos duplican o triplican las ganancias en proporción de sus activos de los bancos del Norte Global: EE. UU. y Canadá, Europa y Australia.

El sistema extractivo de las finanzas chilenas: banca doméstica y externa

  • La banca de capitales privados domésticos registró una rentabilidad mayor que los conglomerados extranjeros (1,5% vs 1,1% en términos de ROA –ver gráfico 1-) y acumuló 2.546 millones de dólares (alrededor del 52% de la masa de beneficios del sistema bancario).
  • Dos tercios de esta masa de utilidades corresponden a los principales conglomerados: Banco de Chile (1.041 millones de dólares) y BCI (725 millones de dólares).
  • La banca extranjera se apropió de unos 1.794,5 millones de dólares de la torta de rentabilidad (37% del total).
  • 488,0 millones corresponden a bancos extraregionales, y apenas 311,5 millones son las utilidades que obtuvo la banca translatina.
  • Con 984,4 millones de rentabilidad, la banca de origen europeo es la que más masa de rentabilidad extrajo, seguida por la de EE. UU. y Canadá (503,6 millones).
    • El grueso de esta rentabilidad correspondió al Banco Santander, de origen español, y que genera 962 millones de dólares de beneficios. De acuerdo al balance del conglomerado, las utilidades en la filial chilena significaron el 7,5% del total[6] (€1,1 mil millones de sus €15 mil millones de beneficios antes de impuestos).
      • Es llamativo que este gran banco europeo extraiga casi 8% de sus beneficios de Chile, mientras que solo le aporta el 4% de los créditos que otorga[7].
  • La banca extranjera demuestra ser una banca extractiva de rentas en la región y, específicamente, en Chile, ya que con una inversión mucho menor consigue sacar más rentabilidad.
  • Para extraer un dólar de rentabilidad, por ejemplo, el banco Santander necesita invertir 13 dólares en EE. UU., 11 dólares en el Reino Unido y 7,5 dólares en España.
  • Para extraer la misma rentabilidad necesita invertir tan solo 4,3 dólares en Chile.
  • El único banco público, Banco del Estado de Chile, mostró una rentabilidad más acotada que los anteriores: obtuvo 494 millones de dólares de utilidades, lo que representó 0,8% de los activos (ver gráfico 1).

 

  • Los principales ganadores: Los primeros puestos están ocupados principalmente por bancos que operan en holdings de retailers y fornecen su servicio de financiamiento vía tarjetas de crédito (Falabella y Ripley) o bien, bancos de inversión de origen extranjero (BTG Pactual – Brasil y JP Morgan – EE. UU.). En términos generales, estas entidades duplican o hasta cuadruplican la media de la rentabilidad del sistema bancario chileno (Tabla 2).
  • Detrás de estos resultados, se observan dos fenómenos de alcance global y asociados a la financiarización:
    • la expansión del consumo apalancada por crédito, lo que posibilita que no se generen presiones por mejoras salariales, a la vez que aumenta el endeudamiento para cubrir gastos básicos como educación y salud;
    • la administración de “carteras de alto valor (wealth management)”, un segmento de alta rentabilidad vinculado a grandes fortunas que invierten en activos internacionales. La contrapartida de este servicio es la predisposición a la fuga de capitales y la evasión/elusión tributaria utilizando guaridas fiscales.

 

 

 

 

 

 

 

[1] Beneficios antes de impuestos.

[2] Las 100 mayores cotizantes registraron un EBITDA (rentabilidad antes de intereses, amortizaciones e impuestos) acumulado de 22.598 mil millones de pesos chilenos (El Mercurio Inversiones, 2020, Guía del Emisor 2020: pg. 3). Disponible en https://servicioscms.bolsadesantiago.com/Biblioteca%20de%20Archivos/Extension/Documentos/Digital_Gu%C3%ADa_Emisores_2020.pdf

[3] El Consejo Minero (2020, p. 55) informa que, en 2019, la gran minería obtuvo una rentabilidad de USD 8.653 millones antes de royalties y aportes al fisco. Disponible en https://consejominero.cl/chile-pais-minero/cifras-actualizadas-de-la-mineria/

[4] Datos para el año 2018 del Observatorio Social de la CEPAL (https://observatoriosocial.cepal.org/inversion/en/countries/chile)

[5] Estimación CELAG a partir de los datos ROE (rentabilidad sobre patrimonio neto) de la Guía del Emisor 2020.

[6] Santander (2019; p. 332). Reporte Anual. Disponible en https://www.santander.com/content/dam/santander-com/es/documentos/informe-anual/2019/ia-2019-informe-anual-es.pdf

[7] Ibid. Pg. 307.

Sergio Martín Páez

Licenciado en Economía por la Universidad de Buenos Aires, Magíster en Economía Política por FLACSO Argentina y Doctor en Economía de la Industria y la Tecnología por la Universidad Federal de Río de Janeiro. Profesor del área de Teoría Economica: Macroeconomia en la Universidad Federal de Ouro Preto de Brasil.…