
El dilema (del prisionero) salario-precios y los espíritus animales. El caso venezolano
Lo primero que hay que dejar claro es que el salario también es un precio. Es el precio al cual se paga la mercancía “mano de obra” en el “mercado de trabajo”. De tal suerte, el salario no es lo opuesto a un precio: es de hecho un precio. Sin embargo, no es un precio … Seguir leyendo